En el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones 2023/24, el Arsenal dirigido por Mikel Arteta empató 2-2 con el Bayern de Múnich dirigido por Thomas Tuchel en el Emirates Stadium de Londres. Bukayo Saka fue titular, Serge Gnabry y Harry Kane cambiaron el rumbo en la primera mitad, y Leandro Trossard, introducido en la segunda mitad, igualó la serie.
El Arsenal tuvo una noche llena de goles y en el minuto 12 Alphonso Davies, que fue expuesto por Saka tras perder el balón, no pudo seguir el ritmo del inglés y en primer plano vio un disparo que pegó en el segundo palo de la estrella.
Pero todo cambió apenas seis minutos después, cuando Gnabry aprovechó una nerviosa defensa de los Gunners. Gabriel, que tuvo todo el tiempo del mundo para complicarse ante la presión de Kane, logró liberarse del inglés cuando pasó el balón a Jakub Chiviol, pero este no logró atrapar el balón. Sí, Sane lo hizo, uniéndose a Leon Goretzka y dejando a Gnabry solo contra David Raya.
El gol conmocionó al Emirates Stadium, donde nadie celebró ya que la selección alemana tenía prohibida la asistencia al partido.
El más frío fue el Arsenal, que recibió otro golpe media hora más tarde. Gnabry lanzó un contraataque en el centro del campo y evadió a su oponente hasta que William Saliba le hizo una zancadilla. Penalti clarísimo, Kane a los once metros.
De vuelta en Londres, en el campo de sus mayores rivales, Kane ve el fantasma de su penalti fallado en Qatar 2022 todavía recordándole su etapa en Inglaterra, pero esta vez tuvo razón (ha marcado 15 goles contra los Gunners). La sangre fría y la calma engañaron a un Raya que lo había derrotado antes de tiempo.
El Bayern de Múnich empató y acabó el partido con Sane corriendo en solitario por el centro del campo, pero le llevó mucho tiempo recuperar la fuerza de sus piernas y se recuperó sorprendentemente con la ayuda de Ben White.